Túnez, que ya era el país musulmán más occidentalizado del norte de Africa, es el único en el que triunfó la Primavera Arabe y salió elegido un partido laico al derribar a su dictador.
De Túnez es de donde salían, posiblemente, más voluntarios para ir a luchar con los djihadistas hacia el extranjero; posiblemente porqué en su propio país no tenían nada que hacer y ahora todavía los iban a perseguir más.
Los islamistas no podían permitirlo y su acto terrorista contra turistas occidentales, especialmente, va contra la economía del país, con el fín de rendirlo y someterlo a sus intereses.
Coronel Von Rohaut
jueves, marzo 19, 2015
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