Pero tampoco es cierto ya que:
- El Cristiano solo se hincha a goles frente a equipos pequeños, como el Español. Ante los grandes se esconde y jamás ha resuelto ningún partido importante o cuando el marcador va muy ajustado.
- Es posible que ésta noche, en el "Dolby Theatre" del Hollywood Boulevard (la calle de las putas y los maricones de Los Angeles), al CR7 le den el "Oscar al más humilde".
- Premio al que jamás podrán aspirar el Messi ni el Neymar, que son unos provocadores natos que no le tienen ningún respeto a sus contrincantes, a los que humillan con sus jugadas perfectas y fantasías variadas (*). Que, por cierto, el público paga para verlas y disfrutarlas...
Coronel Von Rohaut
(*) Como el Stephen Curry, del Golden State Warriors de Oakland, que con sus triples desde la mitad del campo en el último y definitivo segundo, y encestes estratosféricos y puntuaciones de record, está humillando continuamente a sus contrincantes. Claro que allí, tontos que son, todas las estrellas de la NBA le felicitan y lo ponen por las nubes. Serán burros estos americanos... ¡Que aprendan del Pedrerol y periodistas y tertulianos de Madrid, coño!
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