¿Os acordáis de aquel chorizo bastardo llamado Fernández Ibarra o Rodriguez Iborra o algo parecido que, hace algunos años, decía que los catalanes eramos unos insolidarios y que "nos metiéramos el dinero por donde nos cupiera"? (*)
Vale. Pues en Catalunya los funcionarios públicos son un 8% de la población laboral (y ya es excesivo) mientras que en Extremadura, región eminentemente agrícola y por lo que debería tener una burocracia mínima, son un 23%.
O sea que les mantenemos a una cuarta parte de su fuerza laboral activa. Y digo bien que les mantenemos puesto que, incluso sin ver las balanzas fiscales, es obvio que Catalunya es contribuidora neta a los presupuestos del estado mientras que Extremadura es receptora absoluta (y, sin ninguna vergüenza, satisfecha de serlo...).
Agradecida, nunca jamás, que ellos son unos hidalgos castellanos mientras que los catalanes somos unos judíos, o unos fenicios, o unos putos "polacos"...
Que conste que me encanta la región extremeña, su dehesa, sus paisajes y sus gentes. He tenido buenos amigos en Badajoz y sigo teniendo buenos amigos "belloteros", excelentes personas.
Pero sus dirigentes, izquierdistas sectarios y caciques con piel de "sociata" o no, deberían estar todos en un campo de concentración, a trabajos forzados. O en presidio, purgando sus mangoneos y su vergonzosa desfachatez.
Coronel Von Rohaut
(*) Se publicó en la prensa pero ¡ojo", que se lo siguió quedando todo ¡eh!
lunes, julio 14, 2008
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