Toma posesión el tercer gobierno (los dos últimos, consecutivos) de Benjamin Netanyahu.
En la foto, los dos hombres fuertes, Netanyahu, de la coalición Likud-Beytenu (*), y Yair Lapid, (un periodista "progre" pero nacionalista) de Yesh Atid, el segundo partido en votos. Han formado gobierno con el Jewish Home (Habayit Hayehudi), de Naftalí Bennett (millonario y amigo íntimo de Lapid) y el partido Hatnuah, de Tzipi Livni (disidentes de Kadima, un partido a su vez formado por disidentes moderados del Likud que había liderado Ariel Sharon, con disidentes del Labor, o socialistas muchos años en el poder de Israel).
En resumen, la coalición gubernamental la constituyen tres partidos de la derecha nacionalista (solo uno religioso) y dos de centro moderado. En total, 4 partidos laicos y 1 religioso pero partidario que los ultraortodoxos "haredim", exentos de hacer el servicio militar y que viven de subvenciones, sean movilizados y trabajen.
Los dos partidos ultraortoxos, el Shas y el Yahadut Hatora, que defienden estos privilegios y llevan muchos años tocándoles las pelotas a la mayoría de la población de Israel (con leyes y medidas absurdas como hacer parar los autobuses o no dejar volar la compañía aérea nacional El-Al en sábado, para cumplir con el Shabat) que es laica, si no claramente atea, todo y respetando muchas costumbres por tradición, han quedado fuera del gobierno.
El peligro es que las habituales disputas y secesiones entre los judíos (¡parecen independentistas catalanes...! ... o los catalanes parecemos judíos, pero solo en lo malo), hagan necesario volverlos a integrar en el gobierno (por incompatibilidades ideológicas entre Lapid y Bennett, a pesar de su amistad) y Netanyahu ya está acostumbrado a utilizarles, todo y tener que tragarse sus gilipolleces religiosas.
Y los que parecen también totalmente marginados son los antiguos hombres (y mujeres) fuertes del Labor (los herederos de los históricos Ben Gurion, Moshé Dayan, Golda Meir, Ytzak Rabin, etc.), como Ehud Barack.
"Grosso modo", la orientación dura y radical, sin concesiones a los "putos moros", del actual gobierno, me parece correcta y la celebro.
"¡Eretz Yisrael!"
Coronel Von Rohaut
(*) Yisrael Beytenu, aliado del Likud, es el partido formado por judíos de origen ruso, liderados por Avigdor Lieberman, hasta ahora Ministro de Asuntos Exteriores y la ultraderecha más radical de Israel. Se declaran herederos de Ze'ev Jabotinsky, un judío-ruso de principios de siglo y fundador del Sionismo moderno, del que también bebió el Irgun de Menachem Begin, contrincante acérrimo del padre-fundador de Israel, Ben Gurion pero que, a la muerte de éste y al frente del Likud, llegó a Jefe de Gobierno.
lunes, marzo 18, 2013
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