Una editorial americana acaba de editar un libro dedicado a los "perros de guerra", valiosos auxiliares de las tropas, en este caso con ejemplos ingleses, americanos y franceses.
Y la portada está dedicada al perro "Fitas", un malinés del batallón cinófilo (canino) del ejército de tierra francés.
"Fitas", al frente de una unidad de exploradores, ayudó a evitar una emboscada que, en la ya casi olvidada Guerra de Afghanistan, habían preparado una quincena de rebeldes taliban. En el curso de la operación, en la que el perro se implicó, fue capturado por los afghanos que lo retuvieron prisionero durante 4 meses, durante los cuales fue maltratado (¿podríamos decir torturado?); pudo escapar y regresar con los suyos, que lo encontraron el 20 de agosto de 2011, con una grave herida en su pata.
Condecorado con la Medalla de Oro de la Defensa Nacional con Estrella de Plata y con una citación del general Ract-Madoux, entonces y todavía hoy, Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra.
"Fitas" falleció en abril de 2012. Sin duda mi perra, la "Ishka", que jamás hubiera podido ser un "perro de guerra" ya que era miedosa como ella sola, si bien muy inteligente como buena cazadora, lo habrá conocido en el cielo de los perros buenos y se habrán hecho amigos.
Coronel Von Rohaut
martes, marzo 26, 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario