En relación a los aviones "Rafale" accidentados frente a las costa de Catalunya Nord, todavía no se ha encontrado el que cayó pero su piloto, herido, pudo eyectarse.
A primeros de Octubre se localizaron los restos del que se hundió con su piloto. Se encuentran diseminados, ya que el avión se medio desintegró, por 700 metros de profundidad, a lo largo de la ciudad de Port Vendres. Después de varios días de preparación, ayer el batiscafo robotizado de la marina francesa consiguió recuperar el cadáver, que todavía se encontraba atado a su asiento.
Después de 80 horas de trabajo ininterrumpido frente a sus pantallas, los operadores que manejan el robot lograron desatar al piloto, recoger sus restos en una cesta y elevarlo hasta el buque auxiliar. Ahora procederán a buscar las llamadas "cajas negras", que ayudarán a conocer los pormenores del accidente en que los dos aviones chocaron en vuelo. Estaban ensayando despegues y apontajes en el portaaviones "Charles De Gaulle", a plena carga, con 3 missiles simulados, lanzadores de la nueva bomba atómica de la fuerza aeronaval, el ASMP-A.
La operación naval de rastreo y rescate se dirigió desde uno de los BPC (Buque de proyección y de co-mando) o porta-helicópteros con dique inundable para desembarco de barcazas, de los dos que dispone la marina francesa (ver foto). El tercero en construcción se quiere que sea bautizado como "Jeanne d'Arc", nombre que ahora lleva el crucero porta-helicópteros que sirve de buque escuela de la marina y que este año hará su ultima singladura alrededor del mundo, después de 45 años de servicio.
Estos buques, en USA llevan las iniciales LHD (Landing Helicopter Dock) pero su clase es conocida como "Buque de asalto anfibio". En España, el que está en construcción, se llama BPE (Buque de proyección estratégica) L-61 "Juan Carlos I".
Coronel Von Rohaut
No hay comentarios:
Publicar un comentario