Carlos Solchaga, que fue ministro de economía en el gobierno de Felipe González, acaba de hacer unas declaraciones demoledoras sobre el Rodríguez Zapatero.
Siendo Solchaga amigo del anterior jefe de gobierno "sociata", me atrevo a suponer que también este comparte sus manifestaciones.
Ha dicho, más o menos, Solchaga: "Zapatero desprecia a sus ministros, a los que solo considera unos colaboradores o secretarios y a los que no concede ninguna relevancia".
Y hace bien, añado yo, por qué los ministros de Zapatero, los miembros y miembras de su gobierno, elegidos por él uno por uno, son unos zopencos, unos mastuerzos analfabetos e impresentables (*).
Claro que es sabido que los líderes inteligentes se rodean de colaboradores, a ser posible, todavía más inteligentes o preparados que ellos, lo que les enaltece y redunda en su propia eficacia y brillantez.
Por lo tanto, queda claro que no es precisamente la inteligencia o perspicacia lo que define al Zapatero, si no su estulticia y necedad, su gris y ramplona mediocridad.
Coronel Von Rohaut
(*) Salvo, quizás, el Rubalcaba. Y si por que él es el "jefe de la manada", lo que tiene es una "piara".
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