Después de haber negado cualquier posibilidad a la independencia de Catalunya y, por lo tanto, no haber hecho, él que podía, ningún gesto a favor de la misma, ahora dice que sí, que quizás ya no hay ninguna otra posibilidad para Catalunya.
Le ha costado, pero, bienvenido al club...
Solo sigue desbarrando cuando somete o condiciona la consecución de dicha independencia a la realización de un referéndum vinculante, lo que sigue representando mandar dicha independencia "ad kalendas graecas", cuando lo viable es hacerlo mediante una declaración unilateral por mayoría simple, del Parlament de Catalunya lo cual, si los delfines del Sr. Pujol quisieran, que no quieren, se podría tener ya mañana mismo.
Pero ya es un paso, un gran paso para el catalanismo, que un Pujol reconozca, por fín, que solo la independencia es una salida para la nación catalana.
Y clikando aquí se puede leer el artículo completo de Jordi Pujol, de tal día como hoy mismo.
Coronel Von Rohaut
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