Escuchaba el otro día un anuncio por la radio que, refiriéndose al Real Madrid y así y sin más matiz, afirmaba: "El mejor club del mundo".
Muy bien. Pero puesto que en la vida todo es relativo, yo me pregunto: ¿el mejor club del mundo, en relación a qué?
Porqué yo puedo admitir que se diga que ha sido el mejor equipo de fútbol de la segunda mitad del Siglo XX y hasta, si me apuran y sumamos trofeos y campeonatos ganados, el mejor de todo el siglo.
¿Pero el mejor club, así en genérico?
¿Mejor que el "Royal and Ancient Golf Club of St. Andrews", de Escocia y fundado en 1754 y que organiza, en sus "links", el más importante (o uno de los cuatro, pero el más prestigioso) concurso de golf "Open" del mundo?
¿Mejor que el "New York Yacht Club", fundado en 1844 y creador de la "America Club", la más antigua y más prestigiosa regata de vela del mundo?
¿Mejor que el "Manchester United FC", fundado en 1878, depositario de toda la tradición futbolística británica, junto con el "Liverpool FC", y considerado como el club más valuoso del mundo económicamente?
¿O mejor que, por ejemplo, el "FC Barcelona", un poco más antiguo que el Madrid. En el segundo lugar mundial en número de socios (detrás del portugués "Benfica") y muy, muy, por delante del Real Madrid?
Porqué, además, el FC Barcelona es un club polideportivo que, aparte del fútbol, está compitiendo en baloncesto, balonmano, hoquei sobre patines y fútbol sala.
Y en todos estos deportes profesionales de equipo (más algunos otros de "amateurs" o femeninos), ha ganado ligas, copas, competiciones europeas, etc.
Ahora mismo, hoy sin ir más lejos, salvo en hoquei patines que este año anda un poco flojo (a pesar de ser la sección que mas honores ha acumulado a lo largo del tiempo), el FC Barcelona es primero, líder, en las ligas de fútbol 1ª División, basketball, handball y fútbol sala.
Es un palmarés brutal, inigualado, sin parangón en la historia mundial de los deportes. Si el Real Madrid pudiera exhibir, presumir de un ránking similar, la prensa deportiva, radios y televisiones de la capital del reino, con sus periodistas y zánganos pesebristas, así como todos los tertulianos parciales y fanáticos, nos lo estarían refregando por los morros día tras día, hasta dar asco.
¿Y los periodistas catalanes, que casi ni lo mencionan o, si lo hacen, es sin ningún tipo de fanfarria cuando presumir un poco no estaría de más? Pues unos, unos ignorantes que solo saben hablar (hablar, no entender) de fútbol y desconocen todo lo demás. Otros, demasiado prudentes y educados, con exceso de respeto humano y pendientes de no molestar y de no pasar por soberbios. Algunos, unos pobres gilipollas.
Coronel Von Rohaut
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