Después del fracaso de Sacyr en Panamá (una de las primeras constructoras españolas y adictas al régimen, con numerosa obra pública por todo el mundo) al pobre García Margallo pronto le dará más trabajo encontrar y levantar la maltrecha "Marca España" (*), que frenar las ansias independentistas de Catalunya.
Por cierto y ya lo he dicho en diversas ocasiones: ¿A nadie le extraña que las relaciones entre España y Catalunya y en la hora de la secesión, en lugar de encargárselas al Ministro del Interior para que pueda reprimir nuestro separatismo, se las hayan encargado al Ministro de Asuntos Exteriores?
¿No será que ya nos consideran un país extranjero...?
¡Cosas veredes, amigo Sancho...!
Coronel Von Rohaut
(*) Corrupta, arruinada y desprestigiada económica y moralmente...
viernes, enero 03, 2014
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