La chispa de la vida...

La embotelladora catalana (y de otros puntos de España y del norte de Africa) de Coca Cola, Cobega, S.A., recientemente absorbió a casi o todas las demás embotelladoras que operaban en España. Para centralizar el control de la distribución, abrió en Madrid una gran oficina comercial y muchas cadenas de televisión españolas y con central en Madrid dieron, alborozadas, la noticia que Coca Cola, por culpa del proceso independentista, se iba de Catalunya y se instalaba en Madrid (donde en realidad ya existe, desde siempre, la oficina de la casa central americana y que es la que reparte las concesiones de embotellado y distribución y dirige toda la publicidad).

Ahora Cobega está cerrando la planta de Fuenlabrada en Madrid (y otras), y las mismas cadenas que se alegraban, ahora se rasgan las vestiduras, ponen el grito en el cielo y defienden las huelgas y algaradas obreras. Pero es natural que con la concentración, con la moderna planta de Barcelona y otras de España ampliadas, sea suficiente para abastecer el mercado español. Me sabe mal por los obreros madrileños despedidos, si bien la empresa se ha comprometido a recolocar a la mayor parte.

¿Pero, coño, no se alegraban estas cadenas ultraespañolas que la Coca Cola se fuera de Barcelona?

¡Qué cabrones...!

Coronel Von Rohaut

PS. Por cierto, si yo fuera fabricante de canutos y todos los que pueda vender me los fabrican entre 3 obreros ¿a qué santos cojones he de contratar a 6?.
¿Por qué ya gano mucho dinero con los canutos? ¿Acaso es pecado?