La "privatización económica" a la española

Cuando, de acuerdo con las directivas de la Unión Europea, a mediados de los años 90 España procedió a privatizar los grandes monopolios españoles (algunos incluso anteriores al franquismo) que, hasta, entonces, habían sido empresas nacionalizadas (RENFE, Iberia, Telefónica, CAMPSA,Tabacalera, y tantas otras como el Banco Exterior-Argentaria, etc.), lo que hizo el "liberal" señor Aznar fue poner al frente de las mismas a amigos suyos que ya cuidarían que tales empresas siguieran siendo 100% "nacionales" y en la "órbita madrileña" (*).

Al frente de Argentaria (que luego fusionó con el Banco de Bilbao y Vizcaya, al que sacó de la órbita de la burguesía bilbaina), colocó a su amigo Francisco González, que sigue al mando del actual BBVA.

Al frente de la Telefónica (la empresa mas importante de España) puso a su amigo de pupitre escolar, Juan Villallonga, que le salió rana y tuvo que expulsar. Entonces puso al frente de la empresa de comunicaciones a su también amiguete, Cesar Alierta al que, previamente, había colocado en Tabacalera (que fusionó con la francesa SEITA, dando origen a la actual ALTADIS) y que ahora se jubila.

Como que todas estas empresas, actualmente "privadas", tienen su sede en Madrid donde cotizan sus impuestos, la Comunidad madrileña puede presumir de ser la que más impuestos aporta a las arcas estatales, pero no son los impuestos recaudados a los "madrileños de a pié" (*) si no a estas corporaciones de ámbito nacional y hasta supra-nacional y a las multinacionales extranjeras allí radicadas para estar cerca del poder económico decisorio (el gobierno central).

Puro ejemplo de "capitalismo castellano de amiguetes". Nada que ver con la "libre empresa" y el capitalismo anglo-sajón y liberal, ni con la economía industrial y manufacturera.

Coronel Von Rohaut

(*) En el concepto de "impuestos populares", los catalanes siguen siendo, de calle y muy lejos de los siguientes, los que más cotizan al estado recaudador, que se queda los dineros, los expolia a los catalanes y luego los malgasta a lo largo y ancho de Castilla y su "hinterland" natural (Andalucia, Extremadura, la Mancha, etc.).

(PS) En las imagenes, los edificios antiguo y moderno de Telefonica, en Madrid..