Cuando el mundo todavía era civilizado, "El segundo sexo" o sea, la mujer, fue un libro revolucionario (de 1950) de Simone de Beauvoir, la escritora y pensadora y compañera de Jean Paul Sartre (*), los dos arriba, y como él, desarrolladora del "existencialismo filosófico", y pionera filosófica e impulsora del feminismo moderno.
Ahora algunos estados (países) y algunos de los estados federados de USA, en sus pasaportes y carnets o documentos de identidad (DNI, carnet de la Seguridad Social o carnet de conducir), al lado del "género" (allí les vale y dicen "gender") Masculino o Femenino (lo que solo valdría gramaticalmente, y mejor decir "sexo" Hombre o Mujer), están aceptando un "tercer sexo", que llaman "indeterminado".
Si eres "indeterminado" es que no sabes si eres lo uno o lo otro. O no eres nada y en lugar de polla o coño (perdón, pene o vagina) tienes un muñón "indeterminado", con forma de signo de interrogación y que a penas si sirve para mear...
Yo, mas que "indeterminado", pondría como 3ª opción, la de "imbécil o imbécila" (para que no me acusen de políticamente no correcto).
Ya sé que, por el mundo, hay mucho, muchísimo, maricón suelto. Pero, te lo juro por Snoopy, hay mucho más imbécil, hijo de padre desconocido o de madre lesbiana...
Coronel Von Rohaut
(*) Notable escritor y filosofo francés (premio Nobel de literatura que rechazaba pero finalmente ganó), pero del que otra eminencia de la época, el rebelde Boris Vian, renegó de él después de haber sido su discípulo. Le acusó de "enculer les mouches", sodomizar las moscas, en el sentido de perderse en sutilezas filosóficas irrelevantes.
miércoles, septiembre 06, 2017
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