A ver cuanto tardan los Indas y demás energúmenos de las teles castellanas, en llamarles "nazis", indigentes jurídicos o magistrados de pueblo a los jueces del Tribunal Supremo de Schleswig Holstein.
Al dicho Llarena ya se le acaban los delitos de que acusar al bueno del Puigdemont y no acaba de encontrar el oportuno; y mira que dice que ya lo busca, ya...
Yo me permito darle, de buen rollo ¡eh! algunas ideas, igual de gilipollas que las suyas, pero como que a él, según los jueces alemanes, no le da ninguna vergüenza (no tiene...) hacer el ridículo...
- Puede acusarle de proxeneta y de tráfico de personas o trata de blancas, ya que su pareja es rumana y vive cerca de La junquera, donde hay el mayor lupanar de Europa.
- Puede acusarle de pedófilo, por permitir que en las escuelas catalanas se adoctrine a los niños y las niñas en algo que no se sabe bien que es, pero debe de ser malo, ya que lo hacen en lengua catalana.
- De narcotraficante ya que, en su nombre, el Quim Torra le llevó al Pedro Sánchez una botella de un mejunje asqueroso con sabor a anís, llamado "Ratafía", que seguro que es tóxico o estupefaciente. Siendo un licor catalán, seguro que es peligroso para la unidad de España.
- De asalto al furgón blindado (el que lleva a Suiza todo el producto de los robos, desfalcos y atracos de los muy honrados y orgullosos hidalgos castellanos del Partido Popular), pero que hasta ahora se le ha escapado...
- De robar a los pensionistas catalanes al no pagarles lo que podría si de los impuestos aquí recaudados no hubiera dejado que se los llevase un tal Montoro, un salteador de caminos andaluz, de Sierra Morena. Y que, como el Pernales, también actuó en la zona de Madrid, compitiendo a chorizo con el Luis Candelas, el Rodrigo Rato, etc..
Y si al Llarena le fallan todos ya pensaremos más, que somos muy prolíficos. He dicho prolífico, no hemofílico, filatélico, ni sifilítico...
Coronel Von Rohaut
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