Orgulloso de mi hija y de mi nieta que, con fervor patriótico y persistencia, sin desfallecer, participan en todas las manifestaciones independentistas que se celebran en Barcelona.
Igual que, con mi esposa y con unos amigos y ya en tiempos de Franco, cada año asistíamos en tal día como hoy, a rendir puntual homenaje y ante su estatua, a Rafael Casanova, héroe o símbolo de la resistencia catalana del 11 de septiembre 1714. Con previa visita al "Fossar de les Moreres", aquel en el "que no s'hi enterra cap traidor", pues ya entonces habían "botiflers" pero también ya se les tachaba de traidores.
Pero es que ya en los años 20 del pasado siglo y durante la dictadura del general Primo de Rivera y a pesar de la prohibición, mis padres seguían yendo, cada año también, a la estatua de Casanova y tenían que correr delante de las cargas a caballo de los "Guardias de Asalto" con los sables desenvainados. Que el odio, persecución y represión a todo lo catalán, por parte de la España castellana y ocupante, inquisidora, vengativa y expoliadora, también viene de muy lejos, del amanecer de los tiempos modernos...
Coronel Von Rohaut
No hay comentarios:
Publicar un comentario