Me alegra un montón el golpe que se da a los charlatanes y sacamuelas, o "iluminados" que no solo preconizan unas terapias que no lo son, sino que atacan a la medicina auténtica, como no querer vacunar a los niños de enfermedades que, no hace tanto tiempo, diezmaban la población y que, afortunadamente, han sido erradicadas (si bien algunas vuelven por culpa de la inmigración descontrolada y la desidia de algunas gentes...).
Y sacar de las universidades a "engañifas" como la homeopatía y la acupuntura, me parece un acierto.
Pero una presentadora con mucha audiencia decía: "Mucha gente ha sido aliviada con la acupuntura y la homeopatía y no todas estas practicas han de ser malas...".
¡Coño! Pues también mucha gente se ha sentido aliviada, e incluso milagrosamente curada, con un viaje a Lourdes y no por eso debe introducirse el turismo religioso en las facultades de medicina...!
Que el "efecto placebo" hace años que se ha estudiado y si a alguien, una practica en la que cree profundamente (aún que sea una auténtica gilipollez pero mientras no sea una salvajada), le alivia, pues que siga con ella. Pero sin falsa cobertura científica.
Y a los "falsos curanderos" que recomiendan, por ejemplo, dejar la quimioterapia a sus pacientes de cáncer y les venden mejungues de su invención, pues a la cárcel con ellos, por estafadores y asesinos.
Coronel Von Rohaut
viernes, noviembre 16, 2018
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