Según parece los USA ya han pasado un pedido para varios miles de este lanza-granadas de 25 mm., diseñado por la alemana Heckler & Koch en su parte mecánica y balística, más varias empresas electrónicas americanas.
Dispara granadas diseñadas para explotar no al contacto con el blanco si no en el aire y cuando el operador lo haya programado, mediante el visor láser. La munición incorpora un sensor que calcula las vueltas dadas por la bala desde que sale del cañón, para conocer la distancia recorrida y cuando ha de explotar. La carga, de alto explosivo e incluso hiperbárica (que al detonar, la deflagración enciende el aire alrededor, para decirlo de forma resumida), puede explotar encima del blanco, por ejemplo, un soldado emboscado o protegido detrás de un muro. Por lo que haría el trabajo de un mortero o podría ahorrar el solicitar ayuda o apoyo aéreo.
Cada munición cuesta 24€ o sea, 4.000 pesetillas. A mi, cada bala del .22 (*), me cuesta 25 cucas. Y más barata sale una pedrada; pero no debe ser lo mismo...
Coronel Von Rohaut
(*) 0,22 centésimas de pulgada o 22 Long Rifle, equivalente a 5,56 mm. No confundir con la abotellada 5,56 mm. NATO o .223 Winchester, que es un calibre militar para fusil de asalto y no de practicas o tiro al blanco (¿por qué le llamarán "blanco" si el centro de la diana es "negro"?).
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