Ahora se dice lo mismo de los silencios de Rajoy, que tampoco dice ni hace nada a pesar de las presiones de sus jefes Merkel y Sarkozy, y de los mercados que siguen hundiendo España a pesar del vuelco en la cabeza del estado.
¿No será que tampoco sabe ni qué hacer ni qué decir y que, como ha hecho siempre, solo espere que las cosas pasen y se arreglen por si solas?
El italiano Monti ya ha ido a reunirse con la Merkel y el Sarkozy para visualizar una "troika" europea y euroeconómica. Y ni Grecia ni Italia han demorada la transición de un gobierno a otro como hará España.
Los turiferarios e incensarios del Rajoy dicen de él que es prudente, reflexivo y ponderado. Otros dicen que lo que es es cobarde, pusilánime y oportunista. Y, sobre todo, un mediocre.
¡Vaya por Dios! Igual que el difunto ZP.
Coronel Von Rohaut
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