¿Pero qué otro trabajo tiene?

Al poco de escribir mis entradas de ayer sobre el proyecto Mas, veo a este dando cuenta, en rueda de prensa, de su ya realizada visita al sr. Rajoy, en Madrid.

Dice que ha ofrecido su colaboración; no dice, pero entiendo perfectamente que, a cambio, no ha recibido estrictamente nada. Como es habitual.

Dice que la obtención del Pacto Fiscal sigue siendo la prioridad número uno y base fundamental de su legislatura (que todos sabemos que no le darán, incluso él). Pero cuando le preguntan sobre la negociación de dicho Pacto con el Presidente del Gobierno central, dice, con una cara demacrada que ya paga y con voz casi tartamudeante (*): "Que hoy no había tenido tiempo de plantear el tema del Pacto Fiscal al sr. Rajoy", después de dos horas de conversación y acabando de decir que era lo más importante de su proyecto político.

¿Nos toma (nos sigue tomando) por idiotas o es él el que es subnormal profundo?

Solo encuentro dos explicaciones plausibles:

- No ha tenido cojones de hablar del tema.
- Lo ha intentado, pero el Rajoy le ha cortado y ni ha querido escucharle, y él se la ha envainado. Y ante el ridículo de la suprema y enésima bajada de pantalones, no ha tenido cojones de confesarlo.

Conclusión, faltan huevos aquí y sobra maldad, perversión y latrocinio, injusticia y anticatalanismo allá. ¿Solución? No me lo hagáis repetir; pero seguir viviendo con España es el peor negocio de Catalunya en toda su historia y mira tú que cagadas las ha habido... Lástima de algunos traidores, "botiflers" y "quislings"; bastantes masoquistas con el Síndrome de Estocolmo, y muchos, demasiados, catalanes pusilánimes y cagados.

Coronel Von Rohaut

(*) Un amigo político mío, tertuliano a ratos, lo describió en una cadena de televisión y después de su aparición, como "hombre faltado de carácter". Aparte de sin patriotismo, añado yo.