La ministra de Fomento del PP, la llamada Ana Pastor y más fea que la bruja Pirula, ha ejecutado, con exceso y devoción, todas las inversiones previstas para el sistema ferroviario de sus amigas brujas, la Aguirre y la Botella; las líneas de cercanías de Madrid (plan mayor en dinero invertido y menor en tiempo previsto de ejecución), mientras que no ha ejecutado (ni siquiera licitado) ni un 20% del plan de mejoras que se había pactado hace tres años para las "Rodalies", las cercanías de Barcelona. Cuyo traspaso, una auténtica chapuza navajera, una engañifa de trileros hecha con alevosía y nocturnidad por el poder "sociata" de Madrid y aceptada, con matrícula de honor en estupidez y estulticia (salvo que fuera con deslealtad y felonía) por los comemierdas del Tripartit, con los "sociatas" catalanes al frente.
"Yo también me siento español" dicen algunos catalanes desinformados o radicalmente gilipollas, tontos de baba y masoquistas a destajo.
"Delenda est Castella"
Coronel Von Rohaut
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