Y viva Karl Marx y su sacerdote en la tierra, San José Stalin. Yo ni soy ni he sido nunca marxista/leninista/comunista (*), creo en la libertad individual, en el mercado libre y en la economía capitalista. Y en los pobres países que vivían en la órbita rusa y con una sociedad regida por las normas comunistas y la dictadura de sus cúpulas dirigentes, los componentes del "apparatchik" o funcionarios ineptos e ineficaces, el pueblo lo pasaba francamente mal. Con una cierta seguridad al tener cubiertas las necesidades mínimas, pero muy mínimas, y aparte la falta de libertad y la sensación de vivir en un campo de concentración, los bienes de consumo eran muy escasos y de pésima calidad, las colas para comprar cualquier cosa de primera necesidad interminables, etc. Un paso por encima de la miseria.
Pero sus vecinos, nosotros y a causa del miedo, auténtico terror que en los países del mundo occidental tenían al comunismo y a su avance los empresarios, financieros, élites políticas, etc., a través de años de luchas obreras, sindicalismo, etc., los obreros fueron escalando cotas de bienestar, nació o se ensanchó una potente clase media y se hicieron avances notables en el "estado del bienestar" (sueldos decentes, seguridad social y médica, pensiones de jubilación, ayudas y subvenciones, etc.).
Pero un buen día cayó el Muro de Berlín y se hundió el Imperio Soviético. Desapareció el miedo al "socialismo real" y los ricos de siempre vieron que podían volver al estado de cosas anterior, al "capitalismo manchesteriano" o salvaje, al neo-liberalismo más duro, y a volver a esclavizar (hacerla trabajar cada vez más y por menos) a la ya desprotegida clase obrera que, sin el espantajo del "comunismo", y con la globalización y deslocalización de las industrias hacía países que aún no habían llegado a los niveles de bienestar occidentales y a los que los obreros europeos deberían tratar de acercarse si no querían perder sus puestos de trabajo, se jodió el invento.
Los ricos vuelven a ser cada vez más ricos y los pobres más pobres y en Europa está desapareciendo la clase media; que era una falsa clase media y más bien una clase obrera acomodada que había subido un poco en el escalafón del bienestar social y económico (pero ahora el "ascensor social" que la movía solo va hacía abajo, hacía la proletarización). Y a la que los ricos, vengativos y aprovechados, están haciéndole "morder el polvo".
Y en ello estamos tal día como hoy, 29 de octubre del 2013, fiesta de San Narciso.
Ni viviendo en Girona estaría yo para celebrar nada...
Coronel Von Rohaut
(*) Como máximo, marxista-grouchista.
martes, octubre 29, 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario