No llores por mi, Argentina...

Argentina era, en el periodo entre las dos guerras mundiales y todavía durante unos años al final de la Segunda, uno de los países mas ricos del Planeta. Gracias a sus exportaciones de trigo y, sobre todo, de carne de res (*), en unos tiempos en que la tierra pasaba hambre. Pero los argentinos ya no eran ni emprendedores ni trabajadores, vivían del "maná" (**) y presumían que Buenos Aires era el Paris del hemisferio sur (incluso en su arquitectura urbana); un dicho argentino rezaba que "Argentina repone de noche lo que los argentinos malmeten de día".

Pero a pesar de su riqueza natural, desde los años 30 del pasado siglo en los que se instaló el populismo, dictaduras militares y "`peronismo", ni el país ni sus habitantes han levantado cabeza y ya hace más de 70 años. Una forma de fascismo desmotivó al pueblo que se acostumbró a vivir de las subvenciones y de las dádivas del gobierno. Además y como secuela natural, se instaló la corrupción, institucional, desbocada y a gran escala, en un pueblo que ya no era demasiado trabajador (herencia hispano-italiana de sus principales oleadas de inmigrantes).

Como dicen los uruguayos, sus vecinos más civilizados, demócratas y serios, y que incluso lo verbalizó un anterior presidente del Uruguay: "los argentinos son una manga de ladrones". Que podríamos traducir por "son una banda de chorizos..." (he dicho los argentinos, no los españoles...).

¡Y que se distraen bailando tangos y bebiendo mate a toda hora y en cualquier lugar...!

Pero dejádmelo decir: ¡qué auténtica bendición de Dios, yo que soy carnívoro, fue el poder comer varias veces en algunos restaurantes o asadores, tanto de Buenos Aires como de Montevideo! (**). Una carne no de ternera, si no de res adulta y por lo tanto muy sabrosa, roja pero tierna como la mantequilla, gracias a su crianza y engorde natural en las inmensas extensiones herbáceas de la Pampa...

Coronel Von Rohaut

(*) Gran cabaña de la raza inglesa Hereford (fotos 1 y 3), y algo de la francesa Charolesa (para cruces) Para ordeño se prefiere la holandesa Holstein. Más modernamente se implantó la también británica (escocesa) Angus Aberdeen (foto 3), a través de los USA donde es muy habitual para gran producción de carne. Y ultimamente la americana Brahman (tipo Cebú de la India), más resistente, importada de Brasil (ultima imagen).
(**) Mientras en Europa, la tierra agrícola venía siendo explotada desde tiempos de los romanos hace más de 2.000 años y, agotada, sin abonos químicos ya no rinde, en Argentina viene siendo arada y cultivada desde hace cuatro días (en términos geológicos). Y es todavía muy fértil naturalmente.
(***) No se les puede decir a ellos ya que se odian cordialmente y no se tragan ni en pintura (Uruguay, mucho más pequeño, siempre ha temido ser engullido por Argentina y convertirse en una provincia, que es lo que es morfológicamente). Pero geográfica, agrícola, ganadera y culinariamente, son dos paises iguales y hermanos. Culturalmente, no tanto...