Creo que ya lo expliqué hace tiempo pero cuando en mi primer viaje a Nueva York y cuando en Barcelona un ejemplo de músico callejero era el de un gitano sucio tocando, muy mal, la trompeta y que iba acompañado de una cabra subida en un taburete,
paseando por la Quinta Avenida con un compañero de trabajo vimos a un chico, con traje, apoyado en la pared, con la funda del instrumento a sus piés para recoger algunas monedas, y tocando la trompa.
Nos acercamos al escuchar que estaba interpretando, muy bien, el Concierto para Trompa nº 4, en mi bemol mayor, de Wolfgang Amadeus Mozart. Y nos quedamos hasta el final y le dejamos unos billetes.
Puedes escucharlo, clikando aquí. El tercer movimiento o rondó "allegro molto vivace".
Es música superior para gente culta y sensible...
Coronel Von Rohaut
martes, junio 05, 2018
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