La negativa de Obama a aceptar la invitación de Zapatero a co-presidir la reunión UE-USA, en Madrid durante este primer semestre del 2010 en que España ostenta la Presidencia Rotatoria se explica en Europa bajo distintos supuestos; entre ellos, la cada día mayor desafección de los americanos hacía la "vieja" Europa y su interés creciente en sus relaciones con Rusia y la búsqueda de "partenariatos" con China en el área del Pacífico, primordial para la estratégia americana.
Pero también muchos recuerdan la famosa frase americana, pronunciada en su día por Henry Kissinger, de no saber a qué teléfono han de llamar cuando quieren hablar con Europa.
Y es posible que en la reciente visita de Lady Ashton a Hillary Clinton, la inglesa le dijera que ella, el Van Rompuy y la Comisión son los interlocutores válidos, sobre todo después de la entrada en vigor del Tratado de Lisboa y que para qué coño ha de aceptar una invitación, protocolaria y sin ninguna "chicha" política, de un Presidente Rotatorio. O bien que el mismo Obama tuviera reparos en acudir a una reunión presidida por
"el español", al que considera débil políticamente.
Coronel Von Rohaut
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