En mayo de 1945 un periodistas de la agencia americana AP (Associated Press) rompió el embargo solicitado por las autoridades militares y difundió la noticia de la firma de la rendición de Alemania unas horas antes que fuera oficial, lo que fué uno de los mayores "scoop" de la contienda.
Pero, por haber roto la confianza depositada en él por el Gobierno que lo había acogido en la Sala de la Firma como periodista acréditado del Ejército, su empresa lo despidió.
Ahora y muchos años después, la Associated Press le ha presentado excusas póstumas, aceptando su explicación que "no se puede retener información de esta clase; el mundo necesita saber".
Pero yo no estoy de acuerdo. En caso de guerras o conflictos en los que está en juego la seguridad o defensa del estado, la "ley marcial" ha de estar por encima del derecho a informar o cualquier derecho humano u otra "vaina" por el estilo.
Si la razón para ocultar la información no fuera suficiente, ya se verá y castigará luego... que tiempo habrá.
Coronel Von Rohaut
(PS) Durante la Segunda Guerra Mundial, Churchill se opuso a que en la Gran Bretaña se instaurara la censura a la prensa y radio. Pero los medios ingleses, patriotas y responsables, jamás dieron una noticia que pudiera perjudicar la marcha de las hostilidades o pusiera en peligro la seguridad de estado.
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