Que algunos deportes solo se practicasen en Catalunya ya he escrito que era "casi exclusivamente" y este "casi" tiene algún valor. En water-polo, por ejemplo, todos los equipos de la Primera División eran catalanes, de Barcelona y Sabadell principalmente, más el "Canoé" de Madrid y el "Metropole" de Las Palmas de G.C.
Y en baloncesto estaban el Hesperia o el Canoé según años, el Estudiantes y el Real Madrid, de Madrid. El Zaragoza a veces y el Aguilas de Bilbao; los demás, catalanes. El FC Barcelona, el Picadero o el Layetano y el RCD Español, de Barcelona, el Juventud de Badalona, el Hospitalet, el Mataró, el Orillo Verde de Sabadell y el Aismalibar de Moncada y Reixach donde el gran jugador y entrenador, Eduardo Kucharski (de origen polaco y no es coña), se trajo de los Escolapios de Bilbao a un jovencísimo Emiliano Rodriguez, donde se formó; luego lo fichó el Madrid de Saporta y se convirtió en un icono del basket de aquellos años.
Luego, cuando yo, generalizando, digo "España", instintivamente dejo de referirme al conjunto de los "Països Catalans" así como a la muy querida por mí (más que ellos a nosotros) región vasco-navarra, más Iparralde o sea, "Euskal Herría". Y teniendo claro que no es lo mismo de Pamplona hacía arriba que de Pamplona hacía abajo.
Y también que, aparte, los vasco-navarros tienen una vieja y propia tradición de deportes rurales, algunos equiparables, guardando todas las diferencias, a los de los escoceses.
Mientras que, hace años, en mis viajes por el "profundo sur", se cachondeaban de aquel famoso "slogan" puesto en circulación por J.A. Samaranch cuando era Delegado Nacional de Deportes: "Contamos contigo", y me decían "conmigo que no cuenten para estas chorradas del deporte, que son cosa de catalanes...".
Las cosas son cómo son y la memoria es un bién muy valioso.
Coronel Von Rohaut
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