El "PTSD" es un síndrome psicológico que sufren cada vez más soldados durante o al regresar de la guerra y que antes se conocía como "fatiga de guerra" o "battle fatigue". Entre los veteranos de Irak y Afghanistan lo sufren uno de cada cinco soldados americanos (*); pero ya durante la segunda guerra mundial y en la Campaña de Italia, el General Patton consideraba que era una mariconada que se corregía con un buen par de hostias.
Debido a su extensión y coste creciente del tratamiento a los veteranos, preocupa mucho al Pentágono que ha destinado grandes recursos a investigarlo. Se ha intentado tratarlo con drogas (antidepresivos y antipsicóticos), asistencia psicológica, yoga, acupuntura, etc.
Ahora investigadores del hospital militar "Walter Reid", de Washington, creen haber encontrado la solución definitiva, inyectando anestesia local en la nuca de los enfermos, donde se encuentra un nudo de nervios del sistema simpático. Sería como darles una fuerte colleja: Patton tenía razón.
Coronel Von Rohaut
(*) Es evidente que al final de los sufrimientos y cansancios vividos durante una campaña, con episodios de gran violencia y sus tensiones, se puede mostrar una cierta fatiga de guerra o decaimiento moral y existencial. Para ello, al regreso de sus turnos en Afghanistan, todos los soldados franceses que vuelan hacía sus cuarteles u hogares, hacen escala en una base inglesa situada al borde del mar Mediterráneo, en la isla de Chipre y durante 24 o 48 horas, para una ligera descompresión mental y física. Para descomprimirse y relajarse antes de volver a la familia y a la vida diaria.
sábado, mayo 01, 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario