Cada vez mas son los ataques contra blancos selectivos en Afghanistan, llevados a cabo por los americanos, mediante el uso de "drones" o aparatos no tripulados y dirigidos por control remoto y fuertemente armados con missiles, básicamente los antiblindados "Hellfire", autoguiados por láser y radar activo.
La última versión del polivalente "Hornet" F-18, que es el avión "standard" de la US Navy, ya despega de los portaaviones de forma automática y con el piloto colgado de los agarraderos de la cúpula de la cabina para contrarrestar la fuerza ocasionada por la aceleración de la catapulta, que le empuja contra el asiento.
Ya ahora, con la tecnología actual, no sería difícil hacer volar un avión sin piloto, lo que evitaría muchas limitaciones que tienen los aviones en sus maniobras, debido a la presencia humana cuya resistencia a las fuerzas "G" tiene un límite inferior al de la máquina. Pero mandar una escuadrilla a cubrir un objetivo, sin el control físico de un hombre en la cabina, sobre todo para evaluar los hechos sobre la marcha, tomar decisiones y poder evitar errores, parece todavía algo lejano.
Coronel Von Rohaut
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