Ahora que se ha celebrado "el día de la mujer" (lo que no debería existir, por innecesario, igual que no hay ningún día del hombre) alguien escribe en la prensa que "la mujer ha de ser dueña de su discurso (que se pueda expresar sin permiso de su marido), dueña de su cuerpo (o sea, que aborten si quieren pero mejor harían en follar menos o tener más cuidado...), propietarias de su sexualidad (o sea, que la usen cómo y cuando quieran y esto ilegitima totalmente la práctica y el derecho a la violación, todavía muy en boga en ciertas civilizaciones), y de su trabajo (tienen todo el derecho y a percibir, a trabajo igual, salario igual; pero mejor harían en quedarse en casa a cuidar de sus hijos, que es su principal función y que están abandonando) (*).
Y en cuando a que son dueñas de su sexualidad, ya he dicho que estoy de cuerdo pero, teniendo en cuenta que esto se practica en pareja y si es heterosexual mejor, el hombre algo tendrá que decir ya que es quien mete el rabo y, por lo tanto, siempre será mejor dialogarlo y ponerse de acuerdo, que un buen polvo consentido siempre es preferible.
Coronel Von Rohaut
(*) Que por cierto y por naturaleza, quien pare es la mujer y no el hombre. Coño, que no es que el uno sea mejor que el otro, pero que somos distintos morfológicamente (y esta diferenciación no la hemos inventado los machos), quien no lo reconozca es que es idiota voluntario...
lunes, marzo 09, 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario