Una nueva dificultad sobrevenida con los tiempos modernos y el nuevo estatuo de la mujer, que ya no se queda en casa y en la cocina.
Una soldado británica acaba de dar a luz, prematuramente, en Afghanistan. Había quedado embarazada antes de partir hacía el teatro de guerra y había pasado los controles médicos.
Es el primer caso pero, desde que empezaron las hostilidades, otras 200 mujeres militares del Reino Unido han tenido que ser repatriadas por causa del fruto de sus relaciones sexuales, posiblemente incluso legítimas y anteriores a su desplazamiento.
Un antiguo profesor mío de Organización Industrial (eran los años 60), nos hablaba del problema de tener que coordinar los periodos menstruales de las obreras de la fábrica que dirigía, a algunas de las cuales les provocaban malestares y bajas médicas que había que prevenir en las cadenas de montaje.
A la "mili" ya solo le faltaba esto, como si no hubiera bastante con las purgaciones de los chicos...
Coronel Von Rohaut
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