A muchos españolistas irredentos que se las dan de "colegas" les he he oído aconsejarnos a los catalanes: "¿Dónde tendréis mas poder o influencia en Europa que desde dentro de un gran estado como España?".
Naturalmente mienten como gusanos babosos que son. Como estado independiente y soberano, adherido a la Unión Europea sin tener que pagar el peaje de Madrid, Catalunya pasaría de tener los actuales siete eurodiputados a tener dieciséis.
Porqué como es bien sabido, el resto de los eurodiputados españoles (más alguno de los catalanes que votan con el PP y con el PSOE), nunca jamás han votado a favor de ninguna directriz o norma europea que favoreciera los intereses catalanes, salvo que al mismo tiempo fuera buena para el resto de España. Ya en tiempos pasados hubo un ministro de Agricultura español, socialista y zamorano por más señas, que cuando en Bruselas se negociaban ayudas, cuotas o subvenciones a productos que solo interesaban a Catalunya (como las avellanas pongo por ejemplo), sencillamente ni se desplazaba a Bruselas ya que, decía, le daba miedo volar en avión...
Y en este caso de las avellanas, España votaba a favor de Turquía a cambio de favorecer otros productos del agro español, no catalán por cierto. (*)
Exactamente igual que cuando Felipe lV y en el Tratado de los Pirineos, cedió a Francia el Rosellón catalán (más el Vallespir, el Conflent y parte de la Cerdanya y que a él le importaban tres pitos... no eran suyos) como moneda de cambio para la devolución de las posesiones españolas en Italia de Nápoles y Sicilia (heredadas de la Corona de Aragón pero que, desde el Gran Capitán y los Tercios de Italia, ya eran territorios de la rapiña castellana).
Coronel Von Rohaut
(*) ¡Y una mierda el problema de Catalunya con España es tan solo el de las balanzas fiscales, etc....!
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