Hace tiempo que vengo denunciando la campaña anti nacionalismos periféricos, Catalunya y Euskalherría, desatada por el nacionalismo español centralista, absorbente y excluyente.
Ya dije que, después de hacerse con el gobierno autónomo vasco en contra de la voluntad mayoritaría del pueblo y mediante una alianza contra-natura entre PSOE y PP, cuyo único nexo es el antivasquismo militante, estaban desnaturalizando la policía, la "ertzainza" y ahora iban a por la muy nacionalista iglesia vasca, utilizando al "ultra" Rouca Varela, presidente del episcopado español, que ha mandado a San Sebastian a un extremista procedente de la muy castellana diócesis de Palencia.
Pero un 75% de los párrocos de Guipúzcoa han mandado un escrito rechazando dicho nombramiento, que ataca lo más sagrado de su patriotismo.
No sé qué caso les harán, ya que sus oponentes, nuestros enemigos, son muy poderosos. Pero no puede negarse que tienen un par... Por algo el movimiento etarra, en sus principios, nació en las sacristías de las viejas iglesias vascas.
Coronel Von Rohaut
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