Era un acuerdo tomado con el Barcelona en la época de Laporta. Tenía que haberse jugado en el Camp Nou pero el Barça decidió que mejor fueran al Estadio ya que la hierba del campo del Barcelona que ahora, por fín, está bien, no fuera a joderse cuando se acercan partidos trascendentales.
Cuando por la mañana regresaba a Barcelona por la autopista que viene de Francia me encontré con una gran caravana de autocares y coches franceses, de Toulon y de Perpinyà, estos últimos con muchas banderas catalanas flotando al viento. Porqué la USAP de Perpinyà juega, habitualmente, con una equipación con los colores de la bandera, que es la suya de club. Por ello en el estadio de Perpinyà vuelan muchas más banderas catalanas que en el mismo Camp Nou donde se mezclan con las azulgranas.
Cuando se fundó este equipo lo formaban jóvenes hijos de labradores de los alrededores. Pero ahora, al profesionalizarse, también hay jugadores de otros lugares de Francia y alguno extranjero. Pero el club da clases de catalán a sus jugadores para intentar volver a los tiempos en que todos, en el campo, hablaban en catalán, lo que jodía a sus contrincantes gabachos que no podían descubrir las tácticas...
Por cierto, antes de los partidos, sus seguidores organizan una gran butifarrada callejera (*); en una final de Paris la hicieron a los pies de la misma Tour Eiffel. En Barcelona, el Excelentísimo Ayuntamiento no lo autorizó. Aquí, el Ayuntamiento "progresista y de izquierdas" solo autoriza, y subvenciona, desfiles de mariconas emplumadas.
¡Ah, se clasificó la USAP para las semifinales! Es el icono o representante europeo del rugby catalán, aunque no sea de Barcelona, ni falta que hace.
Coronel Von Rohaut
(*) Y durante los partidos está permitido beber cerveza en las gradas, lo que es una gran tradición de este deporte de cuño británico. En Barcelona, no.
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